sábado, 1 de mayo de 2010

Internet y la pérdida de derechos de autor.


Con el surgimiento de la Internet, los usuarios tenemos acceso a contenidos innimaginables procedentes inclusive del lugar más recóndito del mundo. En el caso de la música, muchas bandas y solistas tienen la oportunidad de difundir sus creaciones por varios países a través de portales como Myspace.


Este sitio que cuenta aproximadamente con 120 millones de usuarios, es frecuentemente utilizado por aquellos con deseos de alimentar sus gustos musicales, o bien, darse a conocer y lanzarse al estrellato. Pero, ¿sabías que al subir un contenido a Myspace, pierdes los derechos de autor?


El problema central está en el hecho de que muy pocos, por no decir nadie, lee con detenimiento los términos y condiciones del sitio al momento de registrarse por lo que dan click y aceptan el contrato sin antes haberle puesto la atención necesaria.


Recurriendo al sitio oficial myspace.com, este es un fragmento del contrato que los usuarios deben o no de aceptar: “al mostrar o publicar ['postear'] cualquier contenido o material [textos, fotos, sonidos, diseños, películas, etc] en o a través de cualquier área pública de MySpace.com, el usuario garantiza automáticamente una licencia internacional, no exclusiva, completa y exenta de royalties [con derecho a sublicenciar de manera ilimitada con sublicenciatarios] para utilizar, copiar, modificar, adaptar, traducir, representar, publicitar, almacenar, reproducir, retransmitir y distribuir dicho contenido en y a través de sus servicios”.


Es así como al aceptar el contrato propuesto por el sitio, éste adquiere los derechos de los contenidos que se suban, inclusive una vez que han sido eliminados ya que queda la copia de seguridad.


Un caso muy sonado que puede ejemplificar los derechos que son cedidos a Myspace, es el de la banda llamada Artic Monkeys. Ellos, al utilizar la plataforma, quizá no se percataron de que pagarían un poco caro al sitio por haberlos lanzado a la fama. El precio que debían pagar era muy alto pues el derecho de autor de sus canciones estaba en peligro. Después de un proceso legal, la banda logró ganarle la batalla a la famosa plataforma.


A partir de ahí, el sitio tuvo que modificar su contrato por lo que ahora podemos leer: “MySpace no reclama ningún derecho de propiedad sobre el texto, los archivos, las imágenes, las fotografías, los videos, los sonidos, los arreglos musicales, las obras de autor, las aplicaciones, o sobre cualquier otro material que usted publique en los Servicios MySpace o a través de estos. Tras la publicación de su Contenido en los Servicios MySpace, usted seguirá disponiendo de cualesquiera derechos que tuviera sobre los mismos, sujeto a la licencia limitada prevista en estos Términos de Uso. Al mostrar o dar a conocer en Internet cualquier Contenido en los Servicios MySpace o a través de estos, usted concede a MySpace una licencia limitada para usar modificar, eliminar o agregar información, presentar públicamente, mostrar públicamente, reproducir y distribuir dicho Contenido únicamente en los Servicios MySpace o a través de estos (...) Esta licencia limitada no concede a MySpace el derecho de vender o distribuir de algún otro modo su Contenido fuera de los Servicios MySpace. Una vez que elimine su Contenido del Sitio web MySpace, interrumpiremos la distribución en el plazo más breve posible”.


Si bien es cierto que la Internet y sus sitios nos dan grandes oportunidades de acceder y distribuir contenidos por todo el mundo, debemos de tener precaución de qué sucederá con las fotos, música y contenidos que hacemos de conocimiento público. Parte de nuestra responsabilidad como cibernautas y usuarios, es leer los contratos de Internet tal y como lo hacemos con los impresos en papel.


Finalmente considero que parte de la cibereducación que debemos tener, necesita enseñarnos que Internet no es un lugar en el que estamos exentos de sufrir fraudes o plagios. No sólo se trata de que un sitio se quede con los derechos de nuestro contenido, sino inclusive, habrán otros usuarios que pueden hacerlo. Prevenir e informarnos es nuestra responsabilidad por lo que tenemos el derecho de decidir qué contenido queremos publicar y cuál es preferible hacerlo por otros medios, quizá más idóneos o seguros.
Fuente: MySpace.com

Por: Carmen Hernández






1 comentario:

  1. Pues yo creo en reconocer el trabajo de los demás, y el propio. Peor tmb en que el contenido llegue a varios usuarios. Peor ps si es un tema que se necesita comentar a fondo.

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